Cuatro galardones vascos en los premios Goya 2019
Euskara. Kultura. Mundura.
El pasado sábado, 3 de febrero, se celebró la ceremonia anual de los Premios Goya del cine español, en el Palacio de Exposiciones y Congresos (FIBES) de Sevilla. Los grandes triunfadores fueron Campeones y El Reino, llevándose el primero el Premio a la Mejor película y, el segundo, la mayor cantidad de galardones de la noche. Aunque en esta edición el cine vasco no haya tenido la notoriedad del año pasado, sí ha habido algún que otro ganador de nuestra tierra.
El pasado sábado, 3 de febrero, se celebró la ceremonia anual de los Premios Goya del cine español, en el Palacio de Exposiciones y Congresos (FIBES) de Sevilla. Los grandes triunfadores fueron Campeones y El Reino, llevándose el primero el Premio a la Mejor película y, el segundo, la mayor cantidad de galardones de la noche. Aunque en esta edición el cine vasco no haya tenido la notoriedad del año pasado, sí ha habido algún que otro ganador de nuestra tierra.
La cinta que cuenta el primer amor entre dos mujeres gitanas, Carmen y Lola, le otorgó el Premio a la Mejor dirección novel a la bilbaína Arantxa Echevarría. Este ha sido su primer largometraje, aunque haya trabajado en el cine desde los 18 años. La película contaba con ocho nominaciones en total, y al final se llevó dos premios; el mencionado, y el de Mejor actriz de reparto para la extremeña Carolina Yuste (que, dato interesante, era la única actriz profesional de todo el reparto de más de 150 actores).
Otra película con muchas posibilidades de ganar era la animación Un día más con vida, y los pronósticos se cumplieron: el film ganó el Premio a la mejor película de animación. El pamplonés Raúl de la Fuente (director) y la donostiarra Amaia Remírez (productora) recibieron el busto del pintor con mucha emoción. La cinta cuenta las vivencias del periodista polaco Ryszard Kapuschinski en la guerra de Angola durante el año 1975.
La última película galardonada que cuenta con profesionales vascos en sus filas es La Sombra de la Ley. Este film se sitúa en la España de los años 20, y cuenta las disputas entre anarquistas y matones. El gran trabajo de fotografía y de vestuario para caracterizar aquella época, les ha hecho merecedores, al bilbaíno Josu Incháustegui, del Premio a la mejor dirección de fotografía y, a la también bilbaína Clara Bilbao, del Premio al mejor diseño de vestuario.